El Family Cash Alzira Futbol Sala, ahora sí, está a punto de cerrar su plantilla para competir por segundo año consecutivo en la categoría de ‘Plata’ del futsal nacional. El equipo de la Ribera Alta, al igual que en la temporada pasada, ha apostado por la renovación del grueso de su plantilla, lo que hacen un total de once continuidades, la última la del alzireño Jose Carlos. A ellas se unen los fichajes de Cristian, Peiró, Nacho Serra y ahora, el jovencísimo Pablo García.
El joven jugador nacido en el año 2001 llega procedente del CDFS Valencia, donde ha jugado en las últimas seis campañas. De hecho, hace unas semanas disputó el playoff de ascenso a la Segunda División B ante Segorbe, un cita en la que tuvo una actuación destacada. Es valenciano, diestro, pívot y se le vaticina una gran proyección en el futsal. También ha tenido una notoria presencia en la Selección Valenciana sub19.
El salto de categoría es tangible, pero Pablo García llega al Family Cash Alzira Futbol Sala en plena etapa de formación para seguir aprendiendo y creciendo, en una plantilla a la que aún le queda un efectivo para cerrarse. García trabajará duro para demostrar su valía e intentar ganarse un hueco en el equipo, sin prisa, pero bajo las directrices de Braulio Correal.
Tenía solo 20 años y había aterrizado en Alzira tras un discreto paso por Mengíbar. Joan Miguel Piris (Culllera, 2002) llegó al Family Cash Alzira en la temporada del ascenso. A medida que pasaron las jornadas, el cullerense aumentó el minutaje de juego y, en la recta final de la temporada, se consolidó como un prometedor cierre.
Debido a la situación meteorológica y las deficiencias en la cubierta del Palau d’Esports, el partido contra Ibiza de la J22 podría disputarse en otra ubicación.
