El Family Cash Alzira Futbol Sala volverá a competir en la categoría de ‘plata’ del fútbol sala nacional por segunda temporada consecutiva. Tras la permanencia histórica repentina, por la interrupción de la Covid-19 el pasado marzo, el equipo alzireño certificó una salvación histórica que estaba más que encaminada en la pista, ya que eran 9 puntos -8 más 1 por goal average– los que le separaban del primer equipo que estaba en puestos de descenso.
La directiva, pues, se puso en marcha para buscar nuevas sinergias en el tejido empresarial de la zona, donde se ha encontrado con SOR Ibérica. La firma alzireña, dedicada a la fabricación de vehículos frigoríficos desde 1970, se vuelca con contundencia en el proyecto nacional del club. En las dos próxima temporadas, la imagen de SOR Ibérica no solamente recorrerá kilómetros a través de su sello en los remolques, sino que acompañará al Family Cash en su nueva aventura en Segunda División.
En la firma del acuerdo, el presidente del club, Vicente Fontana, ha reconocido que se trata «de una de las noticias más importantes de la temporada». «Tras cuatro años de gestión, las empresas importantes de la ciudad se suman a nuestro proyecto, ven en él algo interesante», comentaba Fontana, algo que, por su parte, reconocía el director general de SOR Ibérica, José Górriz, quien sostenía la razón del acuerdo en cuatro pilares, uno de ellos «la buena gestión del club en los últimos años».
Otras dos bases del acuerdo son «la colaboración con el desarrollo cultural, social y deportivo de Alzira y, no menos importante, la exposición de marca a nivel nacional». Górriz cerraba su intervención poniendo en valor el crecimiento del interés por el fútbol sala en la ciudad. Vicent Fontana ha agradecido públicamente «a todo el equipo de SOR» este nuevo e ilusionante acuerdo con la firma alzireña. En al oficialidad del acuerdo, junto a Górriz y Fontana, ha estado Dario Tabacco, director financiero de SOR.
Después de dos décadas de fútbol sala y con un campeonato de Tercera División en la vitrina, Kiko puso fin a su carrera. Era 2018. El alzireño, que había sido un jugador clave en la historia del club, muy carismático y querido por la afición, se despidió entre lágrimas de un Palau d’Esports que festejaba el ascenso a 2ª B.
La enfermería del Family Cash sigue encaprichada en acoger inquilinos en esta recta final de año. El último en ocuparla es el portero Fede, que sufrió un choqué en Ferrol al poco de iniciarse la segunda mitad y se tuvo que retirar con la ayuda del fisio y de un compañero para dejar paso a Manolo.
