Rafa Ara, de penalti, y Castejón, que regresaba tras superar la lesión en el tobillo, marcaron los goles
El Family Cash Alzira ha empezado con buen pie el último tramo de diez partidos que restan para conseguir el objetivo de la salvación. Aunque no fue una suma de tres, el punto ante Manzanares -segundo en la tabla- y la buena imagen que recuperó el equipo fueron más que satisfactorias para coger impulso de cara a los siguientes compromisos.
El partido fue muy disputado en todos su recorrido. Ocasión para un lado, contra para el contrario, acciones peligrosas, buenas intervenciones en portería. De hecho, el empate sin goles se mantuvo hasta pasada la media hora de encuentro. Fue en el 32 cuando Daniel adelantó al conjunto manchego. Pocos segundos después, llegó el empate.
Saladié condujo hasta plantarse delante de Juárez, pero justo al entrar en el área fue golpeado por detrás. El colegiado señaló penalti. Rafa Ara plantó el balón y golpeó con contundencia para batir al meta visitante. Alrededor de dos minutos más tarde, era Gonzalo quien ponía por delante a los alzireños tras finalizar un gran contragolpe capitaneado por Saladié.
Pero el intercambio de golpes siguió, y esta vez fue Manzanares quien empató la contienda con un riguroso penalti que Gabri, presunto autor, no se creía. Porky acertó la dirección del disparo de Chus desde los cinco metros, pero no logró entrar en contacto con la bola. El marcador, a pesar de los intentos por parte de ambos, ya no se movería en los minutos restantes.
De esta manera, el Family Cash Alzira Futbol Sala conseguía un importante punto y, sobre todo, un cambio en imagen y sensaciones. Los de Correal, que acumulan 16 puntos tras 15 partidos disputados, visitarán el próximo domingo a Bisontes Castellón, quien aguarda opciones de entrar en el grupo de los cuatro primeros.